Es que nos destruimos solos, sabemos como funciona,
sabemos como ha terminado siempre sabemos que enamorarnos nos costará al final
y es como si nos gustara ir corriendo hacia el dolor, hacia la muerte.
Enterrados, enterrados en vida y en nuestros propios cuerpos en una jaula sin
puerta pero de la cual no podemos salir porque nos encontramos acorralados por
nuestras inseguridades, nuestros miedos , nuestras frustraciones y nuestro
peores momentos, los vemos de frente y no somos capaces de enfrentarnos a
ellos, nos consideramos débiles pero en el fondo sabemos lo
fuertes que somos... Nos pertenecemos, pero hace mucho renunciamos a
tenernos.
Hola!! Te salió lindo el relato. Bechooo ^3^
ResponderBorrarHolaa!
BorrarMuchísimas gracias..
Nos leemos :)